Como interfaz entre la moto y el piloto, el manillar no es sólo el garante de una buena experiencia de conducción, sino también un componente esencial del diseño de la moto. Los manillares Rizoma están fabricados en aluminio mediante un proceso de fabricación especial que garantiza la máxima resistencia estructural y fiabilidad.
El acabado de alta calidad de la superficie se consigue mediante anodizado. Los manillares Rizoma cuentan con la certificación TÜV.
Las tapas de los extremos del manillar de aluminio anodizado son algo más que simples detalles, porque con su variedad de formas y colores atraen todas las miradas. Rizoma confiere a cada moto un estilo único con detalles cautivadores.
Las tapas de manillar de Rizoma también están equipadas con numerosos adaptadores, por lo que pueden utilizarse en los manillares instalados como equipo original o en otros manillares.